Cómo Aumentar Y Mantener La Concentración

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Centrarse en lo que es importante es cada vez más relevante y difícil de practicar. Podemos verlo en la forma en que trabajamos todos los días, en cómo la gran mayoría de las personas no mantiene sus metas o propósitos por más de un mes, o en la increíble cantidad de veces que revisamos nuestros dispositivos en busca de nueva información.

Durante la pandemia, tuve dificultades para concentrarme en mi trabajo y prioridades. Simplemente había demasiadas distracciones – la necesidad de conectarme para socializar a través de mi teléfono y aplicaciones, asegurarme de tener suficientes provisiones en caso de que me enfermara y no pudiera salir durante al menos dos semanas, lidiar con el trabajo regular en un entorno remoto de tiempo completo, etc.

Dos años después, ahora que la vida está más cerca de lo que estaba acostumbrada antes de la pandemia, me encuentro con baja concentración una vez más. Hay un conjunto diferente de distracciones y ajustes. La semana pasada fui a una oficina por primera vez en dos años. Hay una guerra en Europa que parece inquietantemente familiar a cómo comenzaron otras guerras en el siglo pasado. La inflación es alta. Y esta nueva lista sigue y sigue.

Mantenernos ocupadas/os (es decir, sin un descanso para pensar y/o sentir) es un mecanismo de afrontamiento bien conocido. Lo usé primero durante el confinamiento y ahora al volver a un entorno de trabajo híbrido.

Mis síntomas incluyen revisar mi teléfono en busca de mensajes y actualizaciones con mucha frecuencia (a veces más de dos veces en una hora), usar tácticas dilatorias antes de comenzar una tarea importante (por ejemplo, usar el baño, tomar una taza de té/agua/café, etc.) y distraerme mentalmente durante las reuniones hasta el punto de intercambiar de tarea (también conocido como multitarea) con mi teléfono, correo electrónico o sitios web. Algunos días no tengo mucho que mostrar y estoy exhausta porque mi cerebro ha estado descontrolado.

Entonces, ¿cómo puedo volver a mis hábitos productivos y concentrar mi tiempo y energía en las cosas que son importantes para mí?

1) Planifica y prepara

Las habilidades de planificación son esenciales para todo lo que queremos hacer en la vida. Empezamos definiendo lo que queremos lograr en un plazo específico (en cinco años, este año, este trimestre, etc.) como base para los objetivos. Tener metas claras facilita la creación de un plan de acción para alcanzarlas.

Mientras nos preparamos para el año, el trimestre, el mes, la semana, queremos poner nuestras metas al frente y al centro. Esto nos ayudará a responder la pregunta ‘¿esta tarea o actividad me acerca o me aleja de mi objetivo?’

A principios de mes, hago una lista de las cosas que quiero lograr en los próximos 30 días alineadas con las metas que me propuse para el año. Luego, esta lista se convierte en la base de la lista semanal de ‘cosas por lograr’, donde escribo de 3 a 5 tareas para completar en los próximos 7 días.

Algunas personas ponen las tareas mensuales y/o semanales en su calendario para tenerlas visibles y asignar tiempo para completarlas.

2) Usa tu horario estelar para las grandes rocas

Una gran roca es una actividad que te acerca a tus objetivos y que requiere energía mental y atención para realizarla (está incluida en tu lista de prioridades mensuales y/o semanales). Algunos ejemplos son escribir una propuesta de libro, pensar en cómo organizar mejor el equipo, definir los objetivos más importantes, crear la estrategia para la función, actividades de desarrollo personal, etc.

Lo ideal sería tener un bloque sólido de 45 minutos a primera hora de la mañana para hacer frente a una gran roca (o parte de ella). Si 45 minutos suenan demasiado abrumadores en este momento, comienza donde estás, que pueden ser 15 o 30 minutos, y construye a partir de ahí.

Desafortunadamente, muchas personas usan su horario de mayor productividad para revisar su correo electrónico y/o redes sociales. A menos que tu trabajo sea responder correos electrónicos o administrar redes sociales, procesar tu bandeja de entrada o posts no es una gran roca. No utilices el horario estelar de tu cerebro para esta tarea. Es un placer vacío – nos sentimos ‘realizadas/os’ en ese momento porque no tenemos mensajes sin leer, pero no más cerca de nuestras metas o crecimiento.

3) Delega

Podemos pensar que ser un superhéroe es hacerlo todo nosotras/os mismas/os. Y el/la hiper-triunfador/a que hay en nosotros/as apoya completamente este comportamiento porque, ¿quién más lo va a hacer tan perfectamente como nosotras/os? Afortunadamente la pandemia nos obligó a delegar o dejar de hacer ciertas cosas. Era simplemente demasiado. A medida que nos reajustamos en un mundo posterior a la pandemia, no queremos volver al modelo anterior de hacerlo todo.

Ten claro lo que debes hacer personalmente y en persona. ¿Tienes que limpiar tu casa tú mismo/a o puedes proporcionarle el sustento a otra persona? ¿Necesitas ir al supermercado, o puedes pedir en línea y que te lo entreguen o simplemente recogerlo?

Me gusta hacer un cálculo simple para determinar si personalmente debo hacer algo. Anoto cuánto gano por hora y cuánto tiempo llevará la tarea específica. También considero cuánta alegría obtengo de esa tarea. Luego, pienso en cuánto le pagaría a otra persona por hacer ese trabajo. Una vez que tengo los números y la información cualitativa (cuánto placer me da la tarea) frente a mí, decidir qué delegar es pan comido.

Nota para las madres y padres: si decides contratar a alguien para cuidar de tu familia, como una niñera, la gente lo criticará. Si decides renunciar a tu trabajo para convertirse en madre/padre a tiempo completo, la gente lo criticará. Si mantienes tu trabajo y cuidas a tus hijos, la gente te criticará. Mi mensaje es que no importa lo que hagas, alguien no estará de acuerdo con tu decisión. Así que haz lo que sea mejor para ti y tu familia. Las personas que realmente se preocupan por ti (y que no se sienten intimidadas por tu éxito) respetarán y apoyarán tus elecciones.

4) Establece límites

Uno de los bienes más preciados que tenemos es el tiempo. Es finito y no puede renovarse ni expandirse. Todos tenemos 24 horas al día, ni más ni menos. Nuestra tendencia a cuidar de otras personas antepone la felicidad y las necesidades de ellas en detrimento de nuestras prioridades y salud, y nos resulta difícil delegar.

Claridad es amabilidad y eso incluye el hecho de que necesitamos tiempo para descansar y recuperarnos. Si tienes un/a jefe/a exigente que quiere que todo se haga en una hora, puede ser el momento de conversar sobre lo que es realista y lo que no lo es. Si tu familia a menudo exige tu tiempo y energía de forma irrazonable, puede ser el momento de enseñarles cómo hacer ciertas cosas por su cuenta, pedir y/o pagar por ayuda, o trabajar en equipo con otros miembros de la familia.

Si lo permitimos, otras personas absorberán nuestro tiempo y energía. No porque sean malas personas o quieran aprovecharse de nosotras/os. Para nada. Es porque es el camino de menor resistencia. Recuerda que nuestro cerebro conserva la mayor cantidad de energía posible como mecanismo de supervivencia. Es más fácil preguntarle a mamá dónde están las cosas que tratar de encontrarlas nosotras/os mismas/os. Es más fácil pedirle a un colega que reenvíe el correo electrónico que buscarlo en mi bandeja de entrada.

Lo bonito de establecer límites es que se puede hacer con amor y empatía. Y si empezamos a convertirlo en un hábito, las personas que se preocupan por nosotras/os comprenderán, apoyarán y respetarán nuestros límites.

5) Esconde tu celular

Puedo escuchar el grito colectivo de ‘¡no puedo, es imposible! ¡Esta mujer es irrazonable!

Sé que esto es controversial y muchas personas me dirán que no pueden hacerlo porque ese es el único teléfono que tienen, qué pasa si hay una emergencia, etc.

Incluso con todas las notificaciones desactivadas y el teléfono en modo silencioso, verlo desencadena una necesidad en nuestro cerebro de comprobar lo que está pasando, lo que hace que perdamos la concentración y tardemos mucho más en completar una tarea. No es de extrañar que terminemos exhaustos/as después de un día de constantes interrupciones.

Cuando hay una verdadera emergencia, las personas llamarán (en lugar de enviar un correo electrónico o un mensaje de texto). También puedes designar un tono de llamada especial para aquellas personas para las que tú eres su contacto de emergencia, de modo que sus llamadas y/o mensajes pasen por alto la configuración general del teléfono.

Guarda el teléfono en un lugar donde no puedas verlo y que, preferiblemente, esté fuera de tu alcance. En la oficina, dejo mi celular dentro de mi mochila. En casa lo pongo en un estante (no visible y fuera de mi alcance). Esto me permite concentrarme en la tarea en cuestión con mínimas distracciones.

“Recuerda siempre, tu enfoque determina tu realidad.” George Lucas, director de cine estadounidense

Estar distraída/o e intercambiar de tarea (también conocido como multitarea) es más fácil que crear un entorno de distracción baja o nula. Sin embargo, tomar el camino fácil tiene un precio. En este caso, sería sacrificar el tiempo y la energía que necesitamos para lograr lo que definimos como importante para nosotras/os.

Nuestro tiempo y atención son bienes preciosos. La forma en que los usemos marcará una enorme diferencia y nos posicionará en la gran mayoría que está contenta con el ajetreo, navegando infinitamente en las redes sociales y quejándose de que nada les sale bien, o en la población excepcional que persigue sus objetivos y crece.

¿Qué haces para aumentar y mantener la concentración en las prioridades que te acercarán a tus metas? Por favor, déjanos saber en los comentarios.

Como coach de liderazgo, posibilito que el talento logre metas audaces con altos estándares. Mi misión es ayudar a mujeres poco representadas en la industria financiera en la transición de puestos de liderazgo de nivel medio a superior creando conciencia, aumentando la inteligencia emocional y revelando las herramientas y opciones disponibles para ellas.

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