Cómo Cambiar Nuestra Perspectiva Sobre el Dinero y Crear Abundancia

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Cada quien tiene una relación muy diferente con el dinero. Algunas personas piensan que el dinero es la fuente de todos los males. Otras lo ven como un canal para hacer una diferencia usándolo para investigación científica, ayudando a las personas a mejorar sus condiciones actuales, salvando especies en peligro de extinción, etc.

La forma en que pensamos sobre el dinero, como otros aspectos importantes de la vida, está influenciada por los mensajes que recibimos de los adultos a nuestro alrededor mientras crecíamos, así como por las experiencias que acumulamos a medida que navegamos por la vida.

El dinero en sí mismo no es ni bueno ni malo. Objetivamente, es un trozo de papel o metal al que se le asigna un valor, y acordamos colectivamente el tipo de cambio. Podemos optar por cambiar dinero por productos, servicios, experiencias, etc.

Cada quien decide si cambia la hoja de papel que tiene impreso 5 dólares estadounidenses por un café, huevos y queso, una bebida durante happy hour o si lo usaremos para comprar acciones en una empresa.

Amy Blaschka escribió sobre los siete niveles de energía definidos por Bruce Schneider, fundador del Institute for Professional Excellence in Coaching (iPEC), donde realicé mi formación como coach.

Cada persona tiene una perspectiva única de la vida basada en nuestra experiencia, los mensajes que recibimos mientras crecíamos y la personalidad. Tenemos los siete niveles de energía; la diferencia es la cantidad de cada uno que manifestamos en un momento dado.

Dado que el dinero no es ni bueno ni malo, la forma en que lo percibimos depende de nuestros niveles de energía y del pensamiento central asociado con él.

Nivel 1, víctima – No puedo ganar dinero

Nivel 2, conflicto – No obtengo lo que merezco

Nivel 3, responsabilidad – Puedo ganar más dinero si trabajo duro

Nivel 4, preocupación – Uso el dinero para mejorar la vida de otra persona

Nivel 5, reconciliación – Elijo cuánto dinero gano y cómo lo uso

Nivel 6, síntesis – Hay abundancia

Nivel 7, no juzgar – El dinero es una ilusión

Observa que comenzamos a pensar en el dinero como algo que está bajo nuestro control en el nivel 3, donde el pensamiento central es la responsabilidad. La mayoría de las veces, me esfuerzo por pensar en el dinero en el nivel 5, reconciliación. También aprovecho con frecuencia los niveles 6 síntesis y 7 no juzgar para la creación y la trascendencia.

“La riqueza no consiste en tener grandes posesiones, sino en tener pocas necesidades.” Epicteto

¿Cómo llegamos al nivel 5, reconciliación ‘elijo cuánto dinero gano y cómo lo uso’? A continuación, se muestran algunos puntos de partida.

1) Edúcate

Por lo general, tememos a lo desconocido. El dinero es un tema tan tabú (si no más) como el sexo. Cuando les pregunté a mis amistades cercanas sobre este tema, descubrí que ninguno/a de nosotros/as recibió orientación al respecto de nuestros padres, incluso cuando ambos trabajaban.

Tampoco tuvimos una clase en la escuela o en la universidad al respecto. Sí, algunos/as de nosotros/as tomamos Economía, pero no nos enseñó los aspectos prácticos de cómo administrar nuestro dinero.

Entonces, tuvimos que buscar la información en otra parte. Leí varios libros y artículos de expertos/as en administración de dinero y experimenté con diferentes métodos hasta que encontré un set de rutinas que funcionó para mí.

El conocimiento es poder. Y a medida que sabemos más sobre un tema, nos sentimos más seguros/as y comenzamos a ver resultados.

“La paz financiera no es la adquisición de cosas. Es aprender a vivir con menos de lo que ganas, para poder donar y tener dinero para invertir.” Dave Ramsey

2) Mejora tu diálogo interno

Las creencias limitantes son convicciones que tenemos sobre el mundo, otras personas, situaciones y la vida en general que nos impiden obtener lo que queremos. Algunos ejemplos son ‘el dinero es la raíz de todos los males’, ‘los ricos se hacen más ricos y los pobres se vuelven más pobres’, ‘simplemente no soy bueno/a con el dinero’, y la lista continúa.

Las palabras importan. Lo que nos decimos a nosotros/as mismos/as y los/as demás tiene mucho poder. Toma conciencia de cómo hablas de dinero. ¿Es desde la perspectiva de la escasez (‘nunca tengo suficiente dinero’)? ¿O te dices ‘tengo la capacidad de crear abundancia financiera’?

Cada vez que me sorprendo hablando de dinero desde el punto de vista de la escasez, me recuerdo a mí misma que tengo suficiente para las cosas que son esenciales e importantes para mí. Tomo en cuenta que tengo la capacidad de generar abundancia, incluida la financiera.

“El dinero es sólo una herramienta. Te llevará a donde quieras, pero no te reemplazará como conductor/a.” Ayn Rand

3) Mide

Si no puedes medirlo, no puedes mejorarlo. No puedes administrar lo que no puedes medir. Elige la opción que prefieras.

Hace unos años, registré mis ingresos y gastos. Mientras llenaba mi hoja de cálculo, sentí curiosidad y emoción por ver los resultados. ¡Y qué sorpresa me llevé! Fue una experiencia reveladora. Lloré en la privacidad de mi sala al frente de mi archivo. Gastaba más de lo que ganaba. Esa primera medida fue el impulso que necesitaba para definir y ejecutar un plan de acción. Saltemos al 2021 y mi patrimonio neto es ahora más de 30 veces superior al de hace diez años.

A medida que te educas y obtienes orientación de expertos/as, toma nota de cómo usas y te sientes con respecto a tu dinero. ¿Lo estás regalando libremente a cambio de artículos o experiencias de bajo valor? ¿Cómo puedes crear abundancia de otra forma que no sea intercambiando dinero?

“Muchas personas no se preocupan por su dinero hasta que casi se les acaba.” Johann Wolfgang von Goethe

4) Deja de ser más o igual que tu vecino/a

Crecí en un país pequeño en una sociedad aún más chica donde todo el mundo sabía y opinaba sobre la vida de otras personas. Hasta el día de hoy, muchas de mis amistades no han adquirido libertad o seguridad financiera debido a su necesidad de ser más o igual que otros/as – tener el automóvil más reciente, una casa más grande, hacer viajes costosos, etc.

La realidad es que nadie se preocupa por nadie más que por sí mismos/as. Creemos que estamos tratando de impresionar a los/as demás y sólo nos prestan atención si hay algo que les interesa a ellos/as.
Así que deja de impresionarles. No vale la pena. No necesitas deslumbrar con las cosas que tienes a las personas que te aman y se preocupan genuinamente por ti.

La próxima vez que tu vecino/a, colega, amigo/a se jacte de su nuevo automóvil y sientas el tirón verde de la envidia en tu interior, respira hondo y felicítale por su nueva compra. Recuerda que estás tomando decisiones sobre tu dinero y ellos/as están tomando las suyas. Tus elecciones no son ni mejores ni peores y viceversa; sólo son diferentes. Cuanto más practiques este comportamiento, más fácil y natural te sentirás de estar realmente feliz por ellos/as.

“Demasiadas personas gastan el dinero que ganan… para comprar cosas que no quieren… para impresionar a gente que no les gusta.” Will Rogers

¿Qué piensas del dinero? ¿Qué creencias limitantes tienes al respecto? Por favor déjanos saber en los comentarios. Puedes escribir en español, inglés, portugués o francés.

Como coach de liderazgo, posibilito que el talento logre metas audaces con altos estándares. Mi misión es ayudar a las mujeres en la transición de puestos de liderazgo de nivel medio a superior creando conciencia, aumentando la inteligencia emocional y revelando las herramientas y opciones disponibles para ellas, para que puedan realizar y desarrollar su máximo potencial.