Cómo Comenzar A Invertir Y Planificar Para El Retiro
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En mi jornada para respetar mi dinero he pasado por varias etapas. Al principio, el objetivo era reducir mis gastos, construir mi fondo de emergencia y pagar las deudas ‘malas’ que tenía.
Una vez que lo terminé y gané más dinero sin aumentar significativamente mis gastos, comencé a investigar sobre inversiones tanto en cuentas de retiro como fuera de ellas.
Había un pequeño problema con ese plan. No tenía ni idea de por dónde empezar y el tema me parecía aburrido. Respiré hondo y decidí comenzar con dos preguntas básicas: ¿sabía cuál era la contribución de mi empleador a mi plan de jubilación? ¿La estaba aprovechando? La respuesta a ambas preguntas en aquel entonces era ‘no’.
Surgieron así mis dos primeras acciones para ejecutar. Primero, descubrí que el aporte de mi empleador a mi contribución para el retiro era de hasta un 6%. ¿Qué significa esto exactamente? Esto quiere decir que, si yo no aporto nada a mi jubilación, mi empleador hace lo mismo y no aporta nada.
Si elijo poner el 2% de mi salario en mi cuenta de retiro, mi empleador también pondrá el 2% de mi salario. Y así sucesivamente, hasta el 6% – es decir, si aporto el 10% de mi salario a mi cuenta de jubilación, mi empleador aportará el 6% (su contribución máxima) de mi salario.
La segunda acción fue ir al sistema de recursos humanos y aumentar mi contribución a mi cuenta de retiro al 6% de mi salario. A medida que ganaba más dinero y no me endeudaba, fui aumentando gradualmente mis contribuciones hasta llegar al máximo permitido por el IRS.
Un resumen rápido de los planes de retiro
Existen varios planes de jubilación en los EE. UU. según el tipo de empresa para la que trabajes. Muchas compañías privadas o que cotizan en bolsa tendrán un 401K. El gobierno y las organizaciones sin fines de lucro generalmente tienen un 403b o 401(a). Si trabajas de manera independiente puedes abrir una Cuenta de Retiro Individual (IRA por sus siglas en inglés).
Los planes a través de tu empleador funcionan de manera similar: decides qué porcentaje de tu salario contribuirás (hay un límite máximo de contribución anual establecido por el IRS) y éste se descuenta en cada cheque de pago. Tu empleador, en muchos casos, iguala esa contribución hasta un porcentaje determinado. El dinero que tú y tu empleador aportan se destina a varios fondos con bonos, acciones, fondos mutuos, etc. que crecerá con el tiempo.
Una vez que cumplas con los criterios para la jubilación, puedes usar ese dinero sin pagar multas, pero según el tipo de plan y las contribuciones, tendrías que pagar impuestos.
Para la mayoría de los planes de jubilación, puedes aportar dinero antes o después de impuestos. ¿Qué significa esto? En ambos escenarios pagarás impuestos; la diferencia es si los pagas ahora o durante el retiro.
Cuando aportamos dinero antes de impuestos, esa cantidad se elimina de nuestro cheque de pago antes de que se calculen los impuestos. En la mayoría de los casos, el ingreso neto del cheque de pago es mayor. Por ejemplo, si tu cheque de pago es de $1,000 y estás aportando $200 a tu cuenta de retiro, los impuestos se calcularán sobre los $800 restantes. Considerando una tasa impositiva del 10%, tu ingreso neto sería de $720. Cuando cumplas con los criterios para la jubilación, pagarás impuestos sobre el dinero que ganas del plan de retiro.
Cuando aportamos dinero después de impuestos, por otro lado, éstos se calculan antes de restar la contribución de jubilación. En la mayoría de los casos, el ingreso neto del cheque de pago es menor. En nuestro ejemplo, los impuestos se calcularán sobre los $1,000 en tu cheque de pago y los $200 se tomarán del monto después de impuestos. Tu ingreso neto sería de $700 ($1,000 – $100 de impuestos – $200 de contribución de retiro). Cuando cumplas con los criterios para la jubilación, no pagarás impuestos sobre el dinero que ganas del plan de retiro.
“El mayor riesgo de todos es no tomar ninguno.” Mellody Hobson, empresaria estadounidense
Una vez que me manejé el plan de retiro a través de mi empleador, llegó el momento de aprender al menos los conceptos básicos de inversión en acciones, fondos negociables en bolsa (ETFs por sus siglas en inglés) y fondos mutuos para comenzar.
Por supuesto, había oído hablar de ‘el mercado’ o ‘la bolsa’… Incluso me hice una foto con el toro en Wall Street. También sabía que no era un mercado en el sentido tradicional de la palabra. No podía presentarme y decirle a alguien ‘Por favor, deme $100 de TGT’.
Aprendí que hay instituciones financieras donde puedo crear una cuenta de inversión, transferirles dinero y luego comprar acciones, fondos mutuos y otros instrumentos. Algunos ejemplos son Vanguard, Acorns, TD Ameritrade, etc.
¿Adivina cuál fue mi siguiente paso? ¡Adivinaste! Abrí una cuenta en una de esas firmas, la conecté a mi cuenta corriente e hice mi primera transferencia.
Ahora la pregunta era, ¿qué acción debo comprar? ¿Cuándo la vendo? No tengo ni el estómago ni la paciencia para mirar el ticker del mercado desde la campana de apertura hasta la de cierre alrededor del mundo.
Uno de los mejores consejos que leí para elegir qué acciones adquirir fue considerar las empresas donde compro productos y servicios. Otro factor importante es saber cómo ganan dinero. Por ejemplo, voy a Target todo el tiempo, entiendo cómo gana dinero (venden cosas para obtener ganancias), así que tengo acciones de Target.
Me di cuenta de que una vez que empiezo a comprender la mecánica básica de lo que estoy aprendiendo, se despierta mi interés y siento curiosidad por otros aspectos. Empecé a aprender sobre fondos mutuos y fideicomisos de inversión en bienes raíces. Ahora tengo diferentes tipos de inversiones fuera de mis cuentas de retiro en instrumentos de los que al menos tengo un conocimiento básico.
“La felicidad no está en la mera posesión de dinero; reside en la alegría de los logros, en la emoción del esfuerzo creativo.” Franklin D. Roosevelt
En resumen, cuando se trata de cuentas de jubilación, las dos cosas más importantes que se deben hacer son
a) investigar el porcentaje máximo que tu empleador contribuirá a tu plan de retiro, y
b) aportar al menos ese porcentaje que tu empleador iguala; de lo contrario, estás dejando dinero gratis sobre la mesa.
Luego, decide si pagarás los impuestos ahora o si los pagará una vez en la jubilación.
Cuando se trata de invertir por tu cuenta, considera comenzar con acciones o fondos mutuos de compañías que conoces y comprendes: ¿está claro cómo la compañía gana dinero? Si la respuesta es ‘no’, es posible que debas analizar más a fondo.
¿Qué acciones tomarás para tus metas de jubilación y/o inversión? Por favor, déjanos saber en los comentarios.
Como coach de liderazgo, posibilito que el talento logre metas audaces con altos estándares. Mi misión es ayudar a mujeres poco representadas en la industria financiera en la transición de puestos de liderazgo de nivel medio a superior creando conciencia, aumentando la inteligencia emocional y revelando las herramientas y opciones disponibles para ellas.
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