Para Descubrir Tu Propósito Responde Estas Dos Preguntas

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Como sabes, he estado definiendo y escribiendo mis objetivos desde que tenía diez años. Mis primeras metas estuvieron muy influenciadas por lo que mis padres pensaban que debían ser. A medida que me convertí en adulta e independiente, la inercia se hizo cargo y me encontré teniendo objetivos similares año tras año.

Hace unos años, comencé a abordar dos cuestiones importantes a la hora de definir mis propósitos:

1) ¿Son éstas mis verdaderas metas, las cosas que realmente quiero en la vida, o todavía están fuertemente influenciadas por lo que otras personas esperan de mí?

2) ¿Cómo o qué sentiría una vez que logre mis objetivos?

Responder a estas dos preguntas es importante porque somos nosotras/os las/os que llevamos nuestras vidas (no otras personas). Además, queremos tener algo fuerte a lo que aferrarnos cuando las cosas se pongan difíciles, y nos enfrentemos a un obstáculo tras otro a medida que avanzamos hacia nuestra meta.

¿Son éstos mis verdaderos objetivos o estoy tratando de cumplir con las expectativas que otras personas tienen de mí?

Es posible que ustedes conozcan la metodología llamada los 5 Por Qués que se usa para encontrar la causa raíz de un problema específico. Este también es el método preferido de las/os niñas/os de 4 y 5 años para comprender el mundo que les rodea.

Decidí experimentar preguntándome por qué varias veces hasta descubrir si mis motivaciones eran internas o externas y/o si estaba tratando de cumplir con las expectativas de otros.

Veamos dos ejemplos para un mismo objetivo, obtener una promoción en el trabajo, adaptando la herramienta de los 5 Por Qués.

Ejemplo 1 – Toni

Meta: Obtener una promoción en el trabajo al siguiente nivel en mi departamento.

¿Por qué quiero la promoción? Se verá bien en mi currículum, ya que muestra progreso.

¿Por qué quiero que mi currículum muestre progreso? Quiero ser reconocida como alguien que puede crecer.

¿Por qué quiero ser reconocida por mi crecimiento? Quiero ser respetada en mi campo.

¿Por qué quiero ser respetada en mi campo? Quiero mostrarles a los que me dijeron que no podía hacerlo, que lo logré.


Ejemplo 2 – Patrick

Meta: Obtener una promoción en el trabajo al siguiente nivel en mi departamento.

¿Por qué quiero la promoción? Quiero dirigir a otras personas.

¿Por qué quiero dirigir a otras personas? Quiero enseñar a otros lo que he aprendido.

¿Por qué quiero enseñar a otros? Quiero seguir la cadena de favores.

¿Por qué quiero seguir la cadena de favores? Quiero ayudar a otras personas a reconocer y desarrollar su potencial.

Estas dos versiones son perfectamente válidas para las razones de ser individuales de Toni y Patrick. Motivarse por recompensas externas no es ni bueno ni malo, simplemente es. Motivarse por razones internas no es ni bueno ni malo, simplemente es.

Ten en cuenta que para Toni las opciones para lograr su objetivo real – mostrar a aquéllos que me dijeron que no podía hacerlo, que lo logré – son limitadas. Toni necesita el ascenso (o algo parecido) para cumplir su verdadera meta.

Para Patrick, el objetivo es ayudar a otras personas a reconocer y desarrollar su potencial. Esto podría lograrse con el ascenso o por otra ruta que incluya actividades fuera de su trabajo principal, como labor comunitaria, ser mentor, etc.

“Sé lo suficientemente valiente como para vivir la vida de tus sueños de acuerdo con tu visión y propósito en lugar de las expectativas y opiniones de los demás.” Roy T. Bennett, The Light in the Heart

Tómate tu tiempo para encontrar tu verdadero propósito oculto detrás de tus objetivos. Tendrás diferentes versiones de este ejercicio. Podrías usar la hora de pensar para determinar y responder a tus por qués.

Considera los aportes de otras fuentes, como tu Poder Superior (Dios, el Universo, Gaia, etc.), el contenido de libros, podcasts o videos, y las personas que quieren lo mejor para ti que podrían escuchar tus ideas, plantear preguntas perspicaces y/o ser asesores en temas específicos.

Mientras buscas tu por qué, sé consciente de los pensamientos, sentimientos y emociones que surgen para ti. Cuando escribes el objetivo, ¿sientes entusiasmo o indiferencia?

Si lo quitaras de la lista de propósitos, ¿cuál sería tu reacción? Anota en tu diario; esto te ayudará a tener claridad sobre lo que está pasando y cómo se relaciona con tus deseos más profundos.

Otra forma de pensar en esto es preguntándote si necesitas una recompensa por lograr la meta o si lograr la meta es la recompensa.

¿Cómo o qué sentiría una vez que logre esta meta?

Esta interrogante nos ayuda a descubrir lo que verdaderamente estamos buscando. Cuando se usa con la respuesta a la pregunta anterior, empezamos a tener una mejor idea de nuestro propósito y misión en la vida.

Una gran parte de ustedes tiene metas financieras como crear un fondo de emergencia, pagar deudas o contribuir más al plan de retiro. Cuando te imaginas logrando ese objetivo, ¿qué sientes en ese momento?

He hecho esta pregunta a amistades y clientes. Sus respuestas incluyen libertad, tranquilidad, como si me hubieran quitado un peso de encima y ​​poder. Lo que realmente quieren es libertad, tranquilidad, no llevar el mundo sobre sus hombros y poder. El objetivo financiero es una forma de lograrlo. Lo mismo aplica para cualquier otra meta.

Imagina que trabajas en pro de lograr tus objetivos, especialmente aquéllos audaces, arriesgados y emocionantes. Usa todos tus sentidos. ¿Qué ves? ¿Quiénes están ahí contigo? ¿Qué sonidos escuchas? ¿Qué dice la gente? ¿Qué estás oliendo, saboreando y tocando? ¿Qué llevas puesto? Cuanto más vívida sea la representación, más reforzarás a tu Sistema de Activación Reticular (SAR) que esto es importante para ti.

Identificar qué y cómo te quieres sentir mientras trabajas hacia tu meta aumentará tu deseo de continuar en el camino, especialmente cuando inevitablemente comiencen a surgir obstáculos.

Vincula el sentimiento o emoción principal a cada objetivo. Si tienes un tablero de visión, agrega la palabra o una imagen que represente cómo te sentirás una vez que obtengas tu propósito.

“No busques la motivación. Encuentra tu por qué y entonces no habrá excusas entre tus objetivos y tú.” Desconocido

¿Cuáles son tus verdaderas metas, las que quieres para ti? ¿Qué o cómo te sentirías una vez que las cumplas? Por favor, déjanos saber en los comentarios.

Como coach de liderazgo, posibilito que el talento logre metas audaces con altos estándares. Mi misión es ayudar a mujeres poco representadas en la industria financiera en la transición de puestos de liderazgo de nivel medio a superior creando conciencia, aumentando la inteligencia emocional y revelando las herramientas y opciones disponibles para ellas.

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