La Respuesta a Todas las Preguntas Está Dentro de Ti: Deja de decir ‘No sé’

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A principios de este año me di cuenta de cuántas veces al día decía ‘no sé’ y por qué razones. Noté que usaba ‘no sé’ como una muletilla y, peor aún, como una excusa para no dar el siguiente paso hacia mi meta.

Permítanme explicar. El mes pasado mi jefa me pidió que creara un documento con ciertos datos. Mi respuesta inmediata fue ‘no sé si tenemos toda la información que necesitamos.’

Puedes pensar que ésta es una respuesta perfectamente normal y una que habrás usado muchas veces. Estaría de acuerdo si esta fuera la única vez que usé ‘no sé’ en un día, semana o mes.

Pero ¿qué estoy diciendo realmente con ese “inofensivo” ‘no sé’? El subtexto es que tengo miedo de la tarea que tengo entre manos. Es un documento nuevo, no tengo acceso a toda la información que mi jefa quiere y, en el momento de la conversación, no tenía un plan sobre cómo satisfacer esta solicitud – después de todo, era la primera vez que la recibía.

¿Qué podría haber hecho diferente? Podría haber hecho preguntas para entender claramente los requisitos y podría haber dicho ‘confirmaré qué información está fácilmente disponible, crearé un documento ‘simulado’ para que lo revisemos y refinemos.’ Un enfoque y una reacción bastante diferentes. En contraste con la primera respuesta, ésta es expansiva, muestra una mentalidad de crecimiento y mayor autoconfianza.

‘No sé’ es omnipresente en todos los aspectos de nuestras vidas

Cuando comencé a notar cuántas veces decía ‘no sé’ a lo largo del día, me di cuenta de que también lo usaba para evitar conversaciones difíciles, especialmente conmigo misma.

A veces, no es fácil llamar a algo por lo que es. ¿Que quiero decir? Usaré un clásico ejemplo: ‘¡No sé qué tengo que hacer para deshacerme de todo este peso extra!’ Respira hondo…

¿Qué pasa si cambiamos “no sé” por “lo sé” como en ‘¡sé lo que tengo que hacer para deshacerme de este peso extra!’?

El subtexto, y lo que no nos estamos diciendo a nosotros/as mismos/as, es que no queremos hacer lo necesario para perder peso. ¡Lo entiendo! Es difícil levantarse más temprano, especialmente ahora que hace frío, y hacer ejercicio. Un brownie suele ser más sabroso que una ensalada. Y lo más duro de todo es aceptar que nuestros cuerpos están cambiando, y el que teníamos a los 20 se fue y no volverá…

Aquí hay otra que usamos con frecuencia: ‘¡No sé por qué estás tan molesto/a!’ Lo paradójico es que, por lo general, la persona que recibe el mensaje es alguien a quien conocemos bien: nuestra pareja, amistades cercanas o familiares. Por lo tanto, es muy probable que sepamos por qué la persona está molesta.

El subtexto es que no queremos admitir nuestro papel en la situación perturbadora que acabamos de crear. O que no somos capaces de protegerles del dolor. Es terriblemente difícil decir: ‘Creé esta molesta situación’ o ‘No puedo evitarte el dolor.’

Sabemos más de lo que nos damos crédito

¿Cuántas veces te has disuadido de hacer algo audaz porque no tenías las “credenciales” adecuadas? He estado haciendo coaching a otras personas por un largo tiempo, pero no fue hasta que recibí ese documento electrónico que decía “Coach Profesional Certificado” que me atreví a llamarme coach.

Por supuesto, no hay nada de malo en recibir capacitación adicional, adquirir más o diferentes conocimientos y obtener certificaciones que acrediten nuestra experiencia. Yo leo todo el tiempo. Estoy tomando entrenamiento adicional en inteligencia positiva/fitness mental. Me esfuerzo por aprender algo nuevo cada día.

El lado oscuro de la superación personal y la adquisición de conocimientos es que puede provenir de nuestros saboteadores, de un lugar de miedo e inseguridad. Podemos usarlo como una excusa para no tomar medidas enfocadas hacia nuestros objetivos audaces.

En cambio, podemos comenzar donde estamos con lo que tenemos.

Usando el ejemplo de la pérdida de peso, no necesitamos especializarnos en nutrición y fitness antes de dar el primer paso. Una acción inicial podría ser establecer el objetivo, dar esa primera caminata rápida, investigar otras alternativas como una clase de baile en lugar de tomar las tradicionales clases de gimnasia.

Podemos experimentar, crear un piloto, ver cómo funcionan las cosas y continuar con la próxima versión. Sal a caminar por diez minutos y evalúa cómo te va. Luego puedes o continuar con diez minutos durante un par de semanas o aumentar inmediatamente a quince.

La retrospectiva es siempre 20/20

La retrospectiva es siempre 20/20. La paradoja es que necesitamos hacer algo para tener esa retrospectiva. En otras palabras, si nunca sales a caminar rápido por diez minutos, nunca tendrás la retrospectiva para evaluar si fue efectivo para ti o no.

Todo el mundo, desde directores ejecutivos, presidentes y primeros ministros, reyes y reinas y simples mortales, toma decisiones con la información que tiene en ese momento.

¿Qué entiendo por información? Tu propia experiencia y conocimiento, aportes de asesores confiables, que podrían ser personas que conoces en la vida real o autores/expertos a los que sigues, y el sabio/intuición/sabiduría interior que todos/as tenemos.

Una vez que ejecutes la siguiente tarea en el plan de acción, automáticamente tendrás más información independientemente del desenlace. Si el resultado fue el esperado, entonces continúas con el siguiente paso en ese camino. Si, por el contrario, el resultado fue inesperado o sorprendente, entonces modificas la siguiente acción con la nueva información que ahora tienes.

Una cosa más antes de irte

Tenemos suficiente conocimiento para dar el próximo paso hacia nuestra audaz meta que nuestro corazón más desea. Ten en cuenta que el siguiente paso podría ser ‘hablar con Sam sobre inversiones.’ Has identificado a la persona adecuada en tu red de quien deseas obtener información. Otra tarea inmediata podría ser ‘buscar recetas de comidas saludables.’ Ya sabes cómo empezar tu investigación. O podría ser ‘crear un simulacro del nuevo informe mensual.’

Dejemos de usar ‘no sé’ como una muletilla detrás de la cual nos escondemos. Intenta durante una hora usar ‘sí sé’ o ‘lo sé’ (en lugar de ‘no sé’) y observa qué sucede. Llama a las cosas por lo que son. Sabes por qué no obtuviste ese ascenso. Sabes por qué esa persona no te devolvió la llamada. Sabes por qué tu ropa te queda un poco más ajustada.

Todo el mundo toma decisiones con la información que tiene en ese momento. Podríamos tener una suposición educada de cuál sería el resultado. Es solo eso: una conjetura educada, no una certeza. La realidad se materializará una vez que tomemos esa acción (o no – la inacción podría ser parte de la implementación). Para tener una visión retrospectiva, necesitamos algo para mirar hacia atrás. Y recuerda que generalmente nos arrepentimos de las cosas que no hicimos sobre las cosas que hicimos, incluso si el resultado no fue el que esperábamos.

La respuesta a todas las preguntas se encuentra dentro. Ya tenemos experiencia y conocimiento. Hay una red de información y expertos a nuestra disposición. Nuestro sabio es capaz de tomar acciones claras, con tranquilidad y enfocadas sin preocuparse por el resultado.

¿Cuál fue el resultado de tu experimento de decir ‘lo sé’ por un período de tiempo? Por favor, déjanos saber en los comentarios.

Como coach de liderazgo, posibilito que el talento logre metas audaces con altos estándares. Mi misión es empoderar a mujeres poco representadas en la industria financiera en la transición de puestos de liderazgo de nivel medio a superior ejercitando la mente para lograr el máximo rendimiento, paz mental y mejores relaciones.

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